Su mente es una herramienta y un instrumento magnífico si se usa correctamente, ya que usada de forma inadecuada se vuelve muy destructiva. Una de las tareas de la mente es combatir el sufrimiento emocional, lo cual es una de las razones para su incesante actividad.
Ante un dolor o carencia emocional usted se identifica con la mente, genera resistencia a lo que es y hace que el pensamiento se vuelva compulsivo. Ese tipo de pensamiento compulsivo es una adicción y un hábito nocivo que le induce a usted a buscar placer, atención, seguridad, aceptación, ect.. con el objetivo de suprimir la necesidad básica, que son las demandas del ego. Pero mientras más se esfuerza por librarse del dolor, mayor es éste. Ese dolor que usted crea es una forma de no aceptación.
La compulsión surge porque el pasado le da a usted una identidad y el futuro contiene la promesa de la salvación en cualquier forma. La identificación con la mente es una pantalla de conceptos, etiquetas, imágenes, juicios, justificaciones y detalles, la cual usted utiliza erróneamente generando resistencia debido a la falta de aceptación a lo que es. Por lo tanto, usted mismo crea sus problemas y la disfunción.
Usted no se librará de sus sufrimientos, vicios o malos hábitos en su totalidad hasta que no deje de derivar su sentido de si mismo de la identificación con la mente, es decir con el ego.
Mientras usted esté identificado con la mente, el ego gobernará su vida y los conflictos, la disputa y los problemas serán inevitables. Por lo tanto, usted sufrirá innecesariamente. La actividad mental continua crea esa pantalla sórdida que le impide ser consciente y conectarse con Dios.
En el momento en que la identificación se rompe, usted ha dejado sitio para el amor, la alegría y la paz.
LA CLAVE: no busque ser libre del deseo, sino que vuélvase presente como el observador de su mente.
Usted debe hacer esto, o de lo contrario continuará experimentando dolor, angustia y sintiéndose no realizado:
- Mantenga su espacio interior despejado: asegúrese de que no lleva resistencia interior.
- Cuando pretenda hacer algo, suelte la negatividad primero: preste atención a cualquier signo de infelicidad y no permita que el sentimiento se transforme en pensamiento.
- Observe las cosas sin la pantalla de la mente: mire la luz, las formas y los colores sin etiquetarlos mentalmente,
- convierta en un hábito retirar su atención del pasado y el futuro cuando no los necesite y salga de la ilusión del tiempo.